Dejamos atrás una semana en la que abandonamos el último periodo con una alta volatilidad y en la que han tenido lugar diferentes correcciones importantes en los mercados a nivel mundial, volviendo a un tono positivo en los diferentes índices bursátiles. Por lo que hace a los Estados Unidos, esta última semana nos ha mostrado una clara recuperación de los mercados (Dow Jones: +4,25% y S&P 500: +4,30%). Del mismo modo, el continente europeo ha acabado la semana dejando atrás los números rojos (Eurostoxx 50: +3,03%; Dax: +2,85%; FTSE 100: +2,85%; Ibex 35: +2%; MSCI Nordic: +4.50%). En Asia, este tono positivo también ha tenido su efecto (Hang Seng: 5,45%; CSI 300: 3,29% y Nikkei: 1,58%), siendo el índice de la Índia el único que ha continuado con una semana negativa (CNX Nifty: -0,03%).
En Estados Unidos, se han publicado resultados finales sobre la inflación, con unos Índices de Precios de Consumo (IPC) interanuales en línea con los datos obtenidos el mes anterior y superiores a los previstos, pero habiendo aumentado el IPC mensual en 10 puntos básicos este mes. Con el fin de evitar un aumento significativo de la inflación, la FED pretende seguir con la misma política de normalización monetaria y subir gradualmente la tasa de interés.
Por lo que hace al continente europeo, durante esta semana pasada se han publicado diferentes datos macroeconómicos relevantes. Por una parte, el PIB interanual de la Zona Euro es del 2,7%, manteniendo un crecimiento económico en línea con respecto al mes anterior. Por otro lado, el IPC interanual del Reino Unido (3%) y Alemania (1,6%) se ha mantenido en línia con respecto al resultado anterior, y ha disminuido con respecto a éste en España (disminuyendo del 1,1% al 0,6% actual). Por lo tanto, a diferencia de los Estados Unidos, la inflación en Europa no se ha visto incrementada.
En resumen, cerramos una semana con el regreso de la tendencia alcista en los mercados bursátiles a nivel mundial. Del mismo modo, los datos macroeconómicos publicados muestran buenos resultados procedentes de los diferentes indicadores, por los que la inflación únicamente se ha visto ligeramente incrementada en los Estados Unidos. Con el fin de continuar con la estabilidad de la economía y evitar datos perjudiciales, tanto el Banco Central Europeo como la Reserva Federal de los Estados Unidos tomaran medidas al respecto en el corto plazo.