Dejamos atrás una semana en la que las principales plazas bursátiles a nivel mundial han cerrado en números rojos, teniendo lugar una clara corrección en todos los mercados. En el continente americano, sus índices de referencia han sufrido importantes descensos tras uno de los mejores inicios de año de la historia: Dow Jones -4,12% y S&P 500 -3,85%. En el otro lado del atlántico los principales mercados a nivel europeo no han tenido un mejor comportamiento, siguiendo con la corrección del resto del mundo (Eurostoxx 50-3,40%, Dax-4,16%, FTSE100 -2,90% e Ibex 35-3,63%). Del mismo modo, en Asia, los índices de China (Hang Seng -1,67% y CSI300 -2,51%) y Japón (NIKKEI: -1,51%) han cerrado en negativo. De esta forma, el único índice importante que ha aguantado la corrección global de los mercados y ha cerrado la semana en positivo ha sido el índice brasileño, Bovespa +0,86%.
En Estados Unidos, se ha llevada a cabo la primera reunión del año del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) en la que se ha mantenido los tipos de interés inalterados (1,5%), así como la hoja de ruta definida en cuanto a política monetaria se refiere. Por el lado de los datos macroeconómicos del país, se prevé que el crecimiento de la primera economía mundial termine el año en niveles próximos al 2,7%, una tasa de desempleo esperada para la primera mitad del año sin variaciones importantes (alrededor del 4,1%) pero que mejore paulatinamente a partir del mes de junio y unos niveles de precios que se mantengan cercanos al objetivo de la FED del 2%, con un último dato de IPC que fue del 2,1% en diciembre. Esta reunión ha sido la última de Janet Yellen al frente de la Reserva Federal, a partir de ahora tomará su relevo Jerome Powell que como hemos venido comentado en semanas anteriores, no se espera que lleve a cabo cambios drásticos en la política monetaria, sino que el mercado espera que este aplique una política continuista a la llevada a cabo hasta ahora.
En el viejo continente, se han publicado datos preliminares sobre la inflación, con unos Índices de Precios de Consumo (IPC) inferiores a las previsiones y a los datos anteriormente publicados tanto en Alemania (1,6%) como en el conjunto de Europa (1,3%). Esto reafirma la incertidumbre de si el BCE terminará con su programa de compra de activos (APP) a finales de setiembre de este año o lo prolongará hasta fechas posteriores, ya que este final está ligado a la situación de la inflación, objetivo prioritario del organismo europeo y que todavía presenta unos niveles lejanos al objetivo cercano al 2%.
En resumen, cerramos una semana en la que se han producido destacables descensos en las bolsas a nivel mundial, pero que no cambian las buenas perspectivas económicas para el presente año, ya que sobre todo en Europa, se mantienen unos buenos indicadores de actividad económica (PMIs) y de crecimiento, además de unos sólidos fundamentales con una gran cantidad de empresas presentando resultados por encima de las estimaciones.